PROBLEMAS
Los cometas y asteroides que pululan por el cosmos constituyen algunas de las amenazas que pueden asolar a un planeta y, dependiendo de sus dimensiones, pueden ocasionar problemas de gravedad diversa, como el deterioro de su atmósfera, su temperatura e incluso la composición del mismo.
A las personas también nos afectan problemas de naturaleza diversa, los cuales pueden llegar a cambiar nuestra estabilidad emocional, nuestro semblante e incluso nuestra personalidad, respectivamente.
Las soluciones que podamos plantear para solventar un problema no son siempre iguales, pudiendo encontrar personas que se ayuden tanto del consumo de alcohol o sustancias como de la ayuda de un profesional, pero pienso que hay determinados tipos de problemas que deberíamos saber gestionar de forma autónoma y que no todas las soluciones son igual de idóneas.
A mi personalmente un paseo o realizar ejercicio me suele ayudar a aclarar las ideas y a tomar perspectiva. Muchas veces encuentro la solución a mis problemas haciéndome un esquema mental de las razones que los originaron, los posibles efectos o el impacto que puedan llegar a tener.
Pienso que la mejor forma, en general, de afrontar un problema es atendiendo a la lógica y a la razón, entendiendo que hay problemas que podemos solucionar y otros que no. Mucha gente se bloquea y se ofusca cuando no puede resolver una problema que no depende de uno mismo, siendo fruto de ansiedad e inseguridad que luego se trasladan al desempeño diario del resto de nuestras actividades.
Creo que hay que saber derivar aquellos problemas que no son resolubles, sin miedo a que afecten más o menos en el futuro, puesto que el impacto que generen va a estar determinado normalmente por defecto.
Los problemas que sí podemos resolver suelen ser los más numerosos pero pienso también que han de ser aproximados desde la razón, en el sentido de que al menos en el primer mundo los problemas que podamos tener no van a ser de vida o muerte, luego indiferentemente de lo mucho que nos puedan afectar, suelen tener solución. La solución muchas veces puede ser beneficiosa para uno mismo y maliciosa para otra persona, casos en los que pienso que se ha de proceder con cautela y siguiendo principios básicos morales tales como la sinceridad, la empatía o el respeto. Lo ideal sería no tener que recurrir a mentiras piadosas, por ejemplo, ya que en el mejor de los casos la persona que demanda una respuesta ha de estar preparada para afrontar una verdad que no le guste, aunque no suela ser el caso.
En el caso de sufrir una infidelidad estando en pareja, por poner otro ejemplo que me es familiar, pienso que sale más rentable perdonar y dialogar, aceptando la realidad y las carencias que pueda tener la persona infiel que a pagar con la misma moneda y provocar más sufrimiento.
Es interesante puntualizar, ya que me he topado con gente más emocional que yo, que a veces el ser humano no está mentalmente o anímicamente preparado para solucionar un problema, ya sea porque sea víctima de un trastorno psicológico, una inseguridad, o porque no tenga una capacidad de raciocinio lo suficientemente desarrollada como para afrontar el dilema (un niño).
En estas situaciones es posible que la persona afectada busque confort con otro tipo de interacciones humanas más allá del diálogo, como pueden ser el afecto, el etanol, el deporte, etc. Son personas de sensibilidad elevada, normalmente, que se encuentran en una etapa de transición, y con las que suele funcionar simplemente la escucha activa, un abrazo o la muestra de empatía por el dilema que se esté tratando.
En más de alguna ocasión me he topado con alguna personalidad parecida y es gracias al contacto con ellas que he podido volverme un poco más flexible y comedido a la hora de ayudar a los demás. Muchas veces una persona calmada, algo más fría y racional simplemente no es bienvenida a la hora de poner solución a dilemas del corazón (con excepciones), incluso puede ser tomada de prepotente o de sabelotodo, indiferentemente de lo buenas que sean sus intenciones. Hay que tener paciencia.
Parte del recorrido hacia la madurez creo que reside en nuestra forma de afrontar los problemas y la vida en general. Cuanto antes podamos poner punto y aparte de forma eficaz y eficiente a los momentos duros del camino, antes podremos disfrutarlo.
DEPORTE
El ejercicio es una de las mejores cosas que hay en este mundo. Hay quien piensa que estoy obsesionado con él, y no porque sea un deportista de élite, nada más lejos de la realidad, pero sí es verdad que es una de las actividades que más me llenan.
No creo que esté obsesionado ya que toda obsesión lleva a algo malo, pienso que la gente lo entiende así porque llevo un estilo de vida más activo que ellos no son capaces de imitar, bien porque no tengan la capacidad o bien porque sean muy vagos y les de igual tener una salud peor. También tengo que soportar que me digan cosas como "estas demasiado delgado", "necesitas comer más", "te estas quedando en los huesos", etc. Además de que es mi cuerpo y yo soy quien decide cómo tenerlo y cómo cuidarlo, todas esas afirmaciones no están para nada fundamentadas, pienso que es normal que me las digan, no porque tengan sentido, sino porque hasta hace unos años midiendo 1'75 pesaba casi 80 kg y perder 11 de ellos tras crecer un poco se nota.
Para mi el deporte es superación, es crecer física y moralmente a base de mejorarte a ti mismo, a base de ponerte metas que no siempre vas a poder conseguir pero que con determinación y fuerza de voluntad se acaban superando. También es un método infalible para estar en mejor forma, cuanto mejor sea tu sistema cardiovascular, mayor será tu resistencia y más tiempo tendrá que pasar hasta que te canses, además cuanto más fuerza tengas menor será el esfuerzo a realizar en una actividad, las dos aptitudes combinadas y desarrolladas te convierten en lo más parecido a una máquina.
Hay quien opina que con la dieta basta o que incluso se pueden obtener resultados físicos equiparables a los del deporte con ella y esto no puede ser más falso. Una dieta saludable te proporciona niveles de tensión, colesterol y macronutrientes óptimos, así como un mantenimiento correcto del sistema inmunológico y el tránsito intestinal, también sirve para deshacerte de esas grasas perjudiciales y en definitiva para procurar que el organismo funcione correctamente, pero esto no quiere decir que pueda bastar para rendir al máximo, por muy sana que esté una persona, si no realiza deporte no aprovechará todo su potencial y viceversa, hay que combinar ambas cosas y adaptarlas según tu modo de vida.
Mucha gente, a la hora de intentar seguir una rutina de ejercicios se desanima por no ver resultados inmediatos (lo cual es imposible), esto es por desgracia muy normal hoy en día ya que la gente no es constante y sabe que es mucho más fácil y cómodo sentarse en el sofá a ver la tele o tumbarse en la cama con el móvil y mover el culo solo al salir con tus amigos para buscar el primer restaurante de comida rápida que encontréis y seguir comiendo mal.
Las personas dejan de hacer deporte en la mayoría de los casos porque se marcan objetivos imposibles de conseguir, a veces ni siquiera son objetivos realistas, normalmente nos fijamos en modelos de revista, que tienen marcados todos sus perfectos abdominales, unos pectorales para cortar queso y unos brazos increíbles sin saber que ese tipo de cuerpos no son realistas y suelen tener detrás muchas pastillas y muchos productos químicos que no están a nuestro alcance.
No hay comentarios:
Publicar un comentario